Se denominan generalmente muebles de diseño a aquellos que responden a determinados patrones estéticos o estilísticos, y que forman parte de una búsqueda ornamental o artística, más allá que al mismo tiempo no desdeñen la faceta funcional o práctica.
En otras palabras, hablamos de muebles elegantes y con finos acabados, cuya función estética se encuentra prácticamente en el mismo nivel de importancia que su uso práctico. De esta forma, los muebles de diseño son algo más que sillones, sillas o mesas…pueden ser considerados también como pequeñas “obras de arte”.
En la actualidad abundan los muebles de diseño en los estilos más contemporáneos o en boga, como pueden ser el minimalismo, el zen o las tendencias retro (vintage, por ejemplo). En estos muebles existe un fuerte predominio de las líneas puras y simples, con un diseño de extrema exactitud geométrica, que transmite tanta pureza como frialdad. Aquí, la consigna es “menos es más”.
Al mismo tiempo, siguen hallándose en el mercado muebles de diseño de tendencia más clásica o en estilos más antiguos, como el Art Nouveau, el Art Decó o el Barroco, entre otros. En el caso del Art Nouveau, prevalecerán las curvas, las figuras naturales y femeninas, en una fuerte apuesta por la sensualidad.
En cambio, los muebles Art Decó (un estilo justamente surgido en contraposición al Art Nouveau) nos mostrarán líneas rectas y formas geométricas, con terminaciones en punta y diseños compactos. Sin embargo, no tendrán la frialdad y el monocromatismo que puede observarse en muchas propuestas minimalistas. Por último, los muebles de diseño en estilo Barroco no escatimarán en motivos y complementos recargados, con materiales y formas más pesadas y complejas.
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