Es que la compañía Stokke, de origen noruego, nació en el pueblo de Ålesund en 1932. No surgió precisamente con un propósito empresarial, sino que atendía a una necesidad de la familia Stokke, que estaba criando a sus hijos en el diminuto poblado costero de Noruega.
Con el tiempo la idea germinó y evolucionó hasta transformarse en una marca de diseño, que hoy nos acerca una interesante colección con espíritu infantil, compuesta por diferentes elementos. Uno de ellos es la trona denominada Steps, que pasa de la hamaca a la silla.
Sus características hacen posible atravesar todas las edades de los niños, una condición muy práctica y funcional. Por otro lado, el diseño permite que los bebés se encuentren siempre visibles para sus padres, aportando un nivel de seguridad que es bienvenido en todas las fases del crecimiento de los pequeños.
Otro aspecto a destacar es que la trona facilita la interacción social del bebé, siendo ideal para incorporarlo a la mesa de la cocina o el comedor. Al mismo tiempo, la hamaca que forma parte de la colección incluye una funda acolchada que garantiza un movimiento parecido al que realiza la madre durante el arrullo.
Imagen: Stokke.
